martes, 1 de junio de 2010

Red Robin en busca del Grial

Nueva colección para Red Robin, que ahora presenta Planeta en un tomo que reune los cuatro primeros números de la serie protagonizada por el anterior Robin, Tim Drake. En la búsqueda que lleva a cabo Tim por todo el planeta, puesto que cree que Bruce Wayne sigue vivo, se encuentra con pistas que le conducen a un paraje en el desierto de Irak que no hace más que confirmar sus sospechas. Con su identidad de Red Robin, ayudado por algunos miembros de la Liga de Asesinos de R´as Al Ghul aunque reticente, no le queda más remedio que claudicar por algunos hechos que le llevan a aceptarla. Como curiosidad, su búsqueda le lleva por España a ciudades como Madrid y Toledo, después se desplaza a Paris y Berlin siguiendo las pistas que le llevarán a descubrir una prueba que en esta edición de Planeta, se ha publicado en la portada eliminando el suspense que se supone debe mostrar esa escena, relacionada directamente con la última página de "Crisis Final". Christopher Yost se encarga del guión, escribiendo de forma amena las motivaciones de Robin para tomar esta nueva identidad y su relación con Dick, Spoiler y Wonder Girl. En el apartado gráfico, Ramón Bachs no tiene su mejor momento, en ocasiones con un dibujo tosco que lo aleja de sus mejores trabajos. Quizá el cambio de entintadores le perjudique, puesto que en estos números excepto el primero, le acompañan Art Thibert en el segundo (quien deja un resultado mucho más definido) y Guy Major en el resto de episodios.

4 comentarios:

kraustex dijo...

Parece que será un comic muy entretenido!

Carlos dijo...

De momento estos números no están mal, esperemos que siga la misma línea.

Geoff dijo...

Con este cómic debo de llevar como desde el día en que salió diciendo "mañana o pasado lo pillo" y ahí está, todavía esperándome en la libreria... XD

El caso es que, a pesar de leer buenas críticas, cuando lo ojea, nose, no me despierta ese gusanillo para comprarlo.

Carlos dijo...

Está entretenido, pero ahí ya entran los gustos de cada uno de hacerse con él y ver que sucede con este nuevo Red Robin. Quizá eche un poco para atrás que el dibujo no sea lo que uno esperaba de Ramón Bachs.