martes, 3 de febrero de 2015

"Nemo: Las rosas de Berlín" por Alan Moore y Kevin O´Neill

Segundo número especial de "La Liga de Caballeros Extraordinarios" dedicado a Nemo, que bajo el título de "Nemo: Las rosas de Berlín" supone la continuación de "Nemo: Corazón de hielo" que ya comentamos anteriormente. Nos hallamos en 1941 con la Capitana Nemo, Janni, y su inseparable Jack abordando y saqueando buques alemanes del dictador Hynkel, tras la invasión que este realizó de Polonia. Su hija Hira, casada con Robur ha sido capturada por los alemanes tras abatir la aeronave Terror, hallándose prisioneros en alguna parte en Berlín. Embarcan en el nautiloide, un submarino de bolsillo y a través de un conducto gigante llegan a Berlín, donde les han preparado una trampa. Escapan a través de la ciudad, una urbe moderna automatizada con distintos niveles, perseguidos por una mujer junto a los soldados dormidos del doctor Caligari, aunque forjarán una alianza con el doctor Mabuse. Este les informa que Hynkel ha buscado aliados en África, donde ha encontrado la ayuda de la reina Ayesha de Kor, con la condición de que acabe con la Capitana Nemo. Janni y Jack deben rescatar a su hija, aunque ello les cuesta la vida. Acción y aventura es lo que podemos encontrar en este ejemplar, donde el guión de Alan Moore va directo al grano sin detenerse en cuestiones complejas, siendo una lectura disfrutable. Las referencias en este especial están dedicadas al impresionismo alemán, con la mujer robot de Metropolis, Maria, el doctor Caligari del film El gabinete del doctor Caligari o el doctor Mabuse de El testamento del doctor Mabuse, este grupo conocido como los "Héroes del Crepúsculo" en el universo de la "Liga de Caballeros Extraordinarios". También la ciudad de Berlín se asemeja a la Metropolis de Fritz Lang y Hynkel toma la apariencia de Charlie Chaplin en El gran dictador. Algo que nos deja perplejos es la falta de traducción en algunas páginas que aparecen en alemán, no solo unos bocadillos, páginas enteras. Imagino que el original sería así, pero a menos que las leas con un diccionario alemán-español para traducirlas, te pierdes parte de la historia. Moore podía haber añadido la traducción en las páginas finales del ejemplar para facilitar su lectura, en mi opinión. El dibujo de Kevin O´Neill sigue su línea habitual, con grandes viñetas de una página donde se luce, como en la descripción de la ciudad automatizada con numerosos detalles, así como la ración correspondiente de sexo y casquería.  Por último, las cuatro páginas habituales de texto escritas por la reportera Hildy Johnson a comienzos de los años 60, con una entrevista a Janni Dakkar.

No hay comentarios: